4/7/08

Cuanto más opciones tengas para elegir... (Parte I)

Recientemente he leido un artículo muy interesante en la revista Journal of Personality and Social Psychology, titulado "Making Choices Impairs Subsequent Self-Control: A limited resource account of decision making, self regulation and active initiative". Este artículo (y algunos más, aunque para ver la mayoría tendríais que suscribiros...) lo podeís encontrar online siguiendo el link de la American Psychologist Association (A.P.A) que tengo ahí en la izquierda, pero bueno si no quereís leeros todo el artículo en inglés, pero quereis saber de qué va... aquí va un resumen amplio.

En este artículo, se apunta que, cada vez tenemos más opciones para todo (no hay más que ir a uno de las númerosos centros comerciales, y fijarnos en la tan amplia variedad que tenemos en un mismo producto), y tener que decidir una de tantas opciones hace quenos cansemos más, nos frustremos y nos abrumemos. Y por ello, intentan ofrecer una posible explicación, del efecto perjudicial que tiene el tener que elegir. Kathleen Vohs y sus ayudantes realizaron varios experimentos, muy interesantes que ahora detallaré más profundamente.


En el primer experimento, se asignaron 34 participantes (todos ellos estudiantes universitarios de primeros cursos) aleatoriamente a dos condiciones. Los de la condición de "Elegir" tuvieron que elegir entre las dos opciones del producto que se les presentaba en cada ítem (p.ej. camiseta negra o camiseta blanca; bolígrafo azul o bolígrafo negro), y los sujetos pertenecientes a la segunda condición debían de valorar en una escala del 1 al 5 hasta que punto habían utilizado ese producto en el pasado. Ambos grupos debían de contestar a 60 ítems, y los productos eran los mismos, aunque en la condición de "elegir" se incluían dos versiones del producto. Al finalizar todos los sujetos rellenaron el cuestionario PANAS (que evalúa el afecto positivo y negativo) y un cuestionario formado por 8 donde los 7 primeros ítems servían para evaluar diferentes aspectos de hacer elecciones que son importantes en el agotamiento de los recursos personales, y el último preguntaba acerca del nivel de fatiga del sujeto.

Los resultados de este primer estudio piloto fueron que los sujetos de la condición de "elegir" no estaban más cansados que los sujetos de la otra condición (que era lo que se esperaba), y se sentían más activos, conscientes y reflexivos que los sujetos que únicamente habían evaluado la frecuencia de uso de los productos mostrados (los sujetos de la otra condición). Como era de esperar, la condición asignada al sujeto no determinó el afecto positivo ni el afecto negativo.

En el segundo experimento, 30 estudiantes participaron en el experimento A, y otros 30 en el experimento B. Una vez más los participantes fueron asignados aleatoriamente a la condición de "elección" o "no elección". En la primera condición, los participantes tuvieron que elegir entre una larga lista de opciones, tanto dentro de la misma categoría como antes (camiseta negra o blanca), como entre categorías (camiseta o bolígrafo). A los participantes se les dijo que tendrían un regalo al final de la prueba, dependiendo de sus respuestas en esta primera parte de la investigación. Los participantes tuvieron que hacer en total 292 elecciones.

En la segunda condición, la de "no elección" los participantes del experimento A, completaron un cuestionario que requería decir si se han usado o no los productos mencionados (iguales que en la condición de elección), pero no elegir alguno de ellos. En cambio, los participantes de la condición de "no elección" del experimento B, grabaron sus sentimientos, pensamientos y opiniones sobre 8 anuncios, una tarea que implica las preferencias de los participantes, pero que no requiere el hecho de tener que elegir.

Despues de completar latarea encomendada, los participantes de ambas condiciones pasaron a otra sala, donde había una mesa con 20 pequeños vasos de plástico. En cada vaso había un poco de "bebida" (que era una mezcla de zumo de naranja, vinagre, agua y un poco de azucar), y la cantidad era exactamente la misma en todos los vasos. El experimentador les decia que esta parte del experimento era sobre la motivación, y que aunque esta bebida que tenían enfrente no sabía demasiado bien para la mayoría de la gente, no era perjudicial para la salud. Cada participante obtendria una cantidad de dinero por cada vaso que bebiera, y podían beber cuantos vasos quisieran. Se apuntó el número de vasos que bebió cada participante como medida del agotamiento del recurso del auto-control (poder superar el hecho de que sepa mal).

El experimento A aportó pruebas de que el hecho de tener que hacer elecciones dificulta la capacidad auto-regulatoria. Los participantes de la condición de "elección" bebieron significativamente menos vasos que los de la condición de "no elección". El experimento B también aportó pruebas de que las elecciones reducen el posterior auto-control, puesto que los sujetos de la condición de "elección" bebieron significativamente menos vasos que los participantes de la condoción de "no elección". Estos datos confirman la hipótesis que mantenían los autores acerca de que el hecho de tener que tomar decisiones causa una reducción del auto-control.


******* continuará ********

2 comentarios:

  1. Si te ha gustado este experimento te recomiendo, si no lo has leido, "The paradox of choice: why more is less" de Barry Schwartz.

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  2. Un tema muy interesante, y el blog está muy "currao", felicidades. Aquí te mando un vínculo a un artículo en abierto sobre la cuestión.
    http://www.columbia.edu/~ss957/whenchoice.html

    Y gracias por el enlace; es recíproco...

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Muchas gracias por sus aportaciones.

 
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