2/12/08

Navidad, navidad, dulce navidad...

Ya viene acercándose la época de Navidad, de comprar regalos, juntarse con la familia, comer demasiado... si si si... todos los años pensamos que la próxima Navidad no nos pasaremos tanto... bien sea por los gastos que hemos hecho, las cantidades que hemos bebido o comido, o incluso los quebraderos de cabeza que hemos tenido para elegir los regalos... ¿o acaso no os ha pasado nunca romperos realmente la cabeza para regalar algo especial a alguien y que éste ni siquiera se diera cuenta?

Según Elizabeth W. Dunn de la University of British Columbia y colegas, publicaron en la revista Social Cognition, los hombres y las mujeres reaccionan bastante diferentemente al menos a corto plazo al recibir buenos y malos regalos (Dunn et al., 2008). Para obtener esta conclusión, llevaron acabo un experimento bastante simple. Pusieron a alumnos universitarios chateando durante 4 minutos con alumnos del sexo opuesto que no conocian, y después de los 4 minutos, a cada alumno se le presentaba una lista de regalos, donde tenía que elegir uno para el "nuevo amig@ que acababan de hacer". El truco consiste en que cada sujeto antes de empezar a chatear enumero estos regalos segun su orden de preferencia, y después del chat a cada alumno se le da o bien el regalo que más deseaba (condición 1) o el que menos deseaba (condición 2). Después de que los alumnos recibieran el regalos tenían que completar un cuestionario sobre la similitud entre ellos mismos y "el nuevo amig@".

Los resultados mostraron que los hombres y las mujeres no reaccionaban de la misma manera a las condiciones 1 y 2. Mientras que los hombres que habian recibido el regalo que querían se percibían más similares al que daba el regalo, sugiriendo que cuanto mejor el regalo más positivo el efecto de éste en la relación. En cambio, a las mujeres les afectaba mucho menos la condición a la hora de evaluar la similitud.


Fuente: psyblog




 
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